MANIFESTO POR UN MAR SIN PLÁSTICO
El entorno natural de las Islas Baleares es uno de los patrimonios con mayor valor ecológico y paisajístico del arco mediterráneo, con múltiples reconocimientos internacionales como la declaración de Reserva de la Biosfera de la isla de Menorca, la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la Sierra de Tramuntana, la existencia de la pradera de posidonia más importante del estado español o la diversidad de ecosistemas y hábitats mediterráneos como salobrales y zonas húmedas, áreas de montaña, barrancos y acantilados donde habitan numerosas especies animales y vegetales, muchas de ellas endémicas y en peligro de extinción.
El mar Mediterráneo presenta hoy una de las concentraciones más altas de contaminación por plásticos del mundo. Los plásticos en el mar afectan a fauna de todos los niveles, des de ballenas y grandes peces hasta mejillones y otros invertebrados. Algunas especies sufren problemas digestivos hasta llegar a morir por acumulación de plásticos en el estómago y el intestino, mientras que otras, especialmente las más pequeñas y filtradoras, están afectadas por el efecto tóxico de algunos componentes del plástico (como el bisfenol-A) y también por el efecto agregador del plástico sobre determinadas partículas orgánicas y tóxicas como los pesticidas (DDT, PCB).
El 70% de los plásticos acaba en el fondo marino frente el 15% que llega a las playas. Si tenemos la sensación que las playas están sucias a menudo, nos podemos imaginar cómo estará el fondo marino. Además, gran parte de los residuos se van degradando y disgregando como microplásticos hasta incorporarse en la columna de agua y en la cadena trófica. En muchos lugares de las Islas Baleares, se pueden ejemplificar casos concretos de esta situación que ocasiona un grave problema de degradación y contaminación del mar.
Concretamente, sólo en referencia a los plásticos, latas, tetrabrick y vidrio, en las Islas Baleares cada día se pierden y contaminan nuestro territorio 1.000.000 de envases de bebidas. Juntamente con el impacto ambiental y paisajístico de estos residuos en nuestro entorno marino y terrestre, la no recuperación de estos envases supone una pérdida de recursos naturales y unos costes económicos importantes para las administraciones locales. La implantación de instrumentos como los sistemas de retorno para determinados productos y envases se ha mostrado eficiente alrededor del mundo para evitar encontrar envases de bebidas abandonadas en las calles, las playas, el fondo marino o a los campos y bosques.
Además, estos sistemas de retorno tienen otros beneficios como el aumento de la recuperación y reciclaje de estos elementos, la reducción de la dependencia de las importaciones de materiales, la generación y consolidación de puestos de trabajo, la reducción del abandono de residuos con el consecuente impacto en el medio natural, y la mitigación del cambio climático y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Es por todo esto que la futura aprobación de la primera ley balear de Residuos y Suelos Contaminados supone una oportunidad única para el impulso y la implantación de políticas y medidas concretas de reducción, reutilización y mejora del reciclaje en nuestras islas.
Ante esta situación, los adheridos a éste manifiesto pedimos:
- Que en la futura Ley de Residuos y Suelos Contaminados se incluyan medidas urgentes para restringir y reducir la producción y el uso de envases de plástico de un solo uso (bolsas, envases, botellas, cápsulas de café, pajitas, toallitas…).
- Que en la futura Ley de Residuos se incluya la implantación de los sistemas de retorno de envases para eliminar su abandono, para mejorar los resultados de gestión aumentando los niveles de recogida selectiva y la calidad del material recuperado, para facilitar la recuperación de los envases reutilizables, y contribuir de esta forma a implantar una Economía Circular real y efectiva en las Islas Baleares.
- Que las administraciones competentes unan esfuerzos, actuando en todos los frentes posibles – prevención, concienciación, y mejora de procesos de gestión – antes que la degradación y contaminación por plásticos de nuestro mar sea irreversible.
- Que las empresas de distribución eliminen los envases de plástico innecesarios, proporcionen alternativas sostenibles a las personas consumidoras y fomenten la venta a granel y los envases retornables.
